martes, octubre 12, 2004

Rubianes solamente

Ayer seguía muy hecho polvo por el virus o lo que sea (me tiene un poco despistado), pero aún así no podía desaprovechar la tremenda oportunidad que se me presentaba (después de días sin salir mi novia tampoco podía desaprovecharla... me puso una pistola en la cabeza), y es que en la ciudad donde vivo aparecía Pepe Rubianes, a quien siempre recordaré por Makinavaja: el último choriso. Me consta que no es el último... después de la serie, el Maki debió encontrar una hembra de su especie por el paralelo y follar (perdón, procrear) hasta el infinito y más allá, porque últimamente veo mucho choriso por aquí. La especie, lejos de encontrarse en su peor momento evolutivo, parece ser que ha alcanzado tal grado de expansión y sofisticación tecnológica que amenaza con sofocar a todas las demás criaturas humanas y no humanas del orbe.

Hasta ahora no había visto una sola obra teatral de Rubianes, sólo alguna que otra entrevista donde el tío hacía el gamberro un poco, con respuestas soeces e inteligentes. Obviamente, me cayó muy bien, y la serie, en honor del personaje de Ivá, no tenía la misma amplitud sociológica y frenopática que los comics, pero no estaba mal. Por otra parte, el vejete que salía era tan o más cabrón que Maki, y por supuesto, tenía salidas de tono aún más alucinantes.

Por cierto, justo antes de ponerme a escribir esto en el blog, busqué un poquito por internet, y he podido encontrar unos fragmentos del monólogo de ayer, en versión del año 2001, están en vídeo, y aunque no están completos, uno puede hacerse una idea de lo que significa asistir a una obra de este tipejo. Creo que también se puede adquirir por ahí, y seguro, seguro, bajar de la mula.

Nótese que llamo tipejo a Rubianes con un inmenso cariño. No sé porque, pero mis mayores muestras de cariño consisten en cortos pero demoledores adjetivos, que, endosados en otro contexto y a personas con las que tienes escasa confianza, podrían parecer insultantes. Naturalmente, estos adjetivos no se los endoso a mi novia, por mucho que la quiera, ya que, aunque la intención queda clara, el sopapo podría llevármelo igual. En fin, dejemos de divagar que son las 9:12 de la mañana y no estoy para trotes.

En primer lugar, la escena se abre con un monólogo grabado de Rubianes, enmedio de un perfecto insinuar de luces y sombras, donde habla (qué raro) de sí mismo. Uno diría que está en una obra de teatro seria, que abordará intensos y controvertidos conflictos sociales o la actualidad política. No. Enseguida se da uno cuenta de que Rubianes es distinto. Rubianes es él: inimitable.

Creo que jamás he escuchado tantos tacos de una sola persona a lo largo de hora y media. Vamos, se pasó toda la representación con "hijos de puta", "tengo los huevos que me estallan", "la madre que los parió", "todos a mamarla", "putos fachas de mierda, por mí que vayan a follarse a su madre",... podría dar muchos ejemplos, pero curiosamente, con el jartón de reir, no me parecía estar oyendo como asesinaban a mi querido castellano, sino que creía estar oyendo el mejor monólogo que he oido jamás (y aún sigo creyéndolo).

Para empezar, al tío se le va la mente cosa fina. Como él mismo dice: "una mosca que pasa ya me distrae, claro como soy soltero...". Menos mal que soy soltero aún, porque sino juro que me abría las venas ahí mismo. Pocas veces he visto la ironía tan bien ejecutada. Que si los solteros no follan (los casados no paran), que si los solteros no paran de pelársela por lo poco que follan (los casados no se la pelan jamás, dónde se ha visto un casado que se la pele, igual en la época de los Cromañón (¿son maños grandes?) alguno se la pelara, que si los solteros -pobrecitos ellos- sólo iban con jovencitas venteañeras, pensando en las de cincuenta (¡Quién pillara una de cincuenta!), que si los solteros no paraban de salir por la noche (¡Con lo que eso merma la salud, oiga!),...

Y la historia familiar de los Rubianes. Joder, eso merece un Oscar, os lo juro, o eso o un Goya, lo que se tercie. A este tío le tienen que dar un premio, leches, y no al Alejandro Sanz y su puta SGAE (perdón por el taco, pero aquí es tremendamente descriptivo, adecuado y nada ofensivo, ejecutado con aséptica intención académica, puesto que son una banda de putas, perdón, prostitutas). Que si el tatarabuelo se lo mataron en Cuba cuando la Guerra de Ídem (no es que sucediera en Ídem, es por no repetir términos), que si en vez de estar luchando con los españoles se fue a ligar con una mulata,... El epitafio de su señor tatarayayo, que según Rubianes se puede ver en el mausoleo de La Habana es: "Quién iba a ir a la guerra después de haber visto semejante culo", y más abajo entre paréntesis "perdón, mi general").

Luego los Rubianes, que son gallegos, emigraron a Cataluña, que por lo visto, según decía su yayo, era "un país de locos donde forzosamente les tenía que ir bien". Ahí se pierde en su tierna infancia, entre los delirios sexuales de su abuela virgen y nonagenaria, su primer trabajo en la farándula y sus historias sexuales y no tan sexuales. Claro que, a menudo aparecía la mosca cojonera, y Rubianes se iba y se venía, dejando la línea argumental para retomarla más tarde.

En fin, ha sido la hora y media más entretenida que he pasado en mucho tiempo, y recomiendo al personal que, si Rubianes pasa por su localidad, o a 100km, no lo duden: vayan a verle que merece la pena. Eso sí, si usted es de tendencias políticas fachas, ni se le ocurra aparecer, porque no se reirá en absoluto...

Al final, Rubianes nos dió una sorpresa grata. Entre el público estaba, nada más y nada menos, que el vejete que le acompañó en Makinavaja: El Último Choriso, un octogenario chepudo, menudo y con tinte conguitero (según afirma desde hace años va todos los días a la playa, llueve o truene), que se dedicó a recibir el homenaje de la nutrida afición y a contar algún que otro chiste. Siempre me ha caído simpático ese hombre... quizá sea porque no se corta un pelo y es al mismo tiempo, irreverente y respetuosamente cabrón.

En fin, Rubianes Powa xD

Autorradio Kenwood MASK

Esto que pongo a continuación me lo la escrito un amigo, y he considerado oportuno ponerlo aquí, ya que es un perfecto ejemplo de como las firmas asumen las consecuencias de los fallos de sus productos:

"Buenos días,

Les remito este correo electrónico como queja, ya que es lo único que al final nos queda a los clientes finales, de un producto que ustedes producen. En concreto se el autorradio Kenwood-6080R que adquirí hace cuatro años y que tengo estropeado debido a lo que considero un fallo de diseño. Sé, por lo que he leido en internet que ustedes no reconocen este fallo como defecto, pero lo es. Puesto que la duración del cable plano de la carátula abatible es inferior en ciclos al que debería tener para una duración efectiva de la radio de al menos 8 años, que puede ser la duración media en vida de un coche. No ya 10 o 12 años, estoy pidiendo al menos 8. Pero ni eso sólo 4 por un fallo de diseño al realizar las pistas muy estrechas, en concreto a mí se me estropeó la tercera contando desde la derecha.

Pues bien al ser este un fallo que sólo ocurre cuando se llevan unos 4000 ciclos es raro que ocurra en la garantía de la máquina, a no ser que alguien abra y pliegue la carátula 20 veces al día. El problema no sería mucho si la reparación fuese económica pero es que ni siquiera eso, cuando llevas 4 años con un autorradio y te dicen que tienes que pagar 50 euros dices, pues no, y te pones a desarmar tú la radio, al menos ahora me saldrá por 25 euros la reparación, precio que considero excesivo ya que en internet se puede caonseguir el susodicho cable por 11 dolares en América.

Tengo claro que NO volveré a comprar una radio Kenwood, ni con carátula abatible ni sin ella, muy bonita sí pero cara. Y viendo que todas las nuevas autorradios tienen el mismo sistema supongo habrán rediseñado el sistema, lo que mantendría mi hipótesis de que es un defecto de diseño. Si no lo han hecho van a tener muy mala publicidad, más de la que tienen ahora en internet donde vienen hasta cursillos acelerados de como cambiar el maldito cable plano. Yo por mi parte no recomendaré a nadie una autorradio con carátula extriable de KW como la mayoría de los usuarios que tienen una y se les ha roto harán; seguro que el 90% en 4 años, sino no tendrían el cable en los servicios técnicos en stock.

Se despide atentamente,
R."