Primera ecografía del nene

Hoy a las 9:00 de la mañana teníamos cita en maternidad, en Barna, para la primera ecografía del nene. Nos cogieron un poco más tarde de lo previsto, y enseguida tumbaron a Sonia en la camilla. Hubo un poco de mala suerte, porque la conexión de la máquina con la televisión estaba abombada y las únicas imágenes que tuvimos fueron las del monitor. Digo mala suerte porque la futura madre no pudo ver apenas nada. Yo sí :-DD

Lo primero que llama la atención es la nitidez de la imagen. Todo el mundo nos había dicho que veríamos sombras informes, pero todo lo contrario. Se le notaban las extremidades, aún no formadas del todo, los riñones, el corazón (bombeaba de forma insistente), el cerebro con todas las rugosidades (no hay huesos en este estadio que oculten lo que hay dentro de la cavidad craneal),... y en la parte en 3D se le vieron hasta los ojillos y la cara por completo. Es increíble, no puede describirse la sensación de ver a tu hijo por primera vez, y ni siquiera lo voy a intentar. Solo diré que se te queda cara de lelo y no puedes parar de sonreir. Sonia, como no podía apenas ver las imágenes, se iba fijando en mi cara para intentar enterarse de algo. Menos mal que en cierto momento la médica volvió el monitor hacia ella, pero eso duró poco.

Se mueve mucho, lo pude comprobar y la propia médico lo decía. Los latidos son fuertes y consistentes y todo está perfectamente, tanto el niño como la placenta. No se sabe el sexo aún... nos han dado cita para dentro de cuatro semanas para la siguiente ecografía, y ahí seguro que vemos mucho más. Tiene una edad gestacional de 11,2 semanas, y mide casi cinco centímetros. Tiene una hernia fisiológica, pero por lo visto es normal en todos los fetos. Según comenta la médica, el intestino se les sale del cuerpo para volver a soldarse junto con él semanas más tarde. El tamaño de la hernia corresponde a la edad gestacional, así que todo está perfecto. Nada presenta alteraciones y todo está como debe.

Lo que más me llamó la atención fueron dos cosas: la nitidez del cerebro y la fuerza del corazón. Se veía como circulaba la sangre por su entorno, y se oían los latidos con una intensidad impresionante. Se mueve mucho, y me dio la sensación de que una vez volvió la espalda a la cámara. No sabía que con esa edad pudieran hacerlo...

En fin, impresionante... ya tenemos las primeras fotografías para el álbum. Una de las capturas de la ecografía, que podéis ver arriba (ampliable) la tengo ya de fondo de pantalla en mi ordenador del curro :-D