viernes, diciembre 09, 2005

¡Prohibido morirse, cojones!

Estaba hoy desayunando (leche con cacao y unas yayitas de chocolate, que no comía desde hace años) cuando casi se me atraganta una galleta, como a Bush en su día. Hay cosas que por más que estés curtido en leer noticias, en ver sandeces o cosas que repugnan al alma y al estómago, no terminas de creer.

Conejito locoEn Biritiba-Mirim, un municipio brasileño de 28.000 habitantes cercano a Sao Paulo, su alcalde ha presentado al consistorio un proyecto para (sentáos si no lo estáis, que supongo que sí, vaya chorrada de nota) prohibir a la gente morirse. Sí, como lo leéis. Por lo visto, el alcalde está hasta las narices de que la gente se le muera, ya que no caben más en el cementerio (que tiene alojados 50.000 vecinos que pasaron a mejor vida), y él no tiene pelas para construir otro.

El fulano, llamado Roberto Pereira da Silva, recomienda en el proyecto a sus ciudadanos a "cuidar de su salud para no fallecer", porque de lo contrario tendrán que soportar sanciones peculiarias. Vamos, la diñas y no contentos con eso, los del ayuntamiento te multan como si hubieras estacionado mal tu vehículo (o tu cuerpo).

Luego dicen que los políticos españoles están locos o son estúpidos... no es por faltar al amigo Roberto Pereira da Silva, pero debería pensar las cosas un par de veces antes de hablar o de actuar. Seguro que aquí en España se oirían las risas de los convecinos del garrulo este si se aprobase la medida y a continuación él muriera :-DDDD

En fin, el Mundo está loco...