Panching

Bueno, después de la tormenta dicen que viene la calma. Por fin se acabaron los dos meses de vida frenética en el trabajo, de salir a las tantas y de estresarse mucho, pero mucho, mucho. Hoy, cierre de junio, estoy de panching en el currelo, desde el que escribo. Nadie me molesta, y con mi aire acondicionado portátil a pleno rendimiento, una botella de dos litros de agua fría, una conexión ADSL a explotar y mi reluctante felicidad... estoy en la gloria.

Claro que ahora me viene el mes de trimestre, pero no es lo mismo. Además, sólo tendremos que pasar julio y ya estará aquí agosto, es decir, las VACACIONESSSSS :-D

Estoy feliz de la vida, pero no creáis que no doy un palo al agua. Como ahora ya no tengo urgencias que atender, me dedico a lo que me gusta. Ahora mismo estoy preparando la siguiente mereth, que para quien no las conozca, son unas quedadas que organizamos con la gente de dos páginas web y un chat de IRC. Esta vez será del 26 al 29 de agosto en Torrelles, cerca de Barcelona, en un paraje idílico, en una casa de colonias preciosa. De momento he reservado el sitio, y ahora estoy moviendo otros hilos para conseguir que el personal que vaya se lo pase bien. Esta vez no tendré que recorrer cientos de kilómetros: tendré la mereth en casita casi, a veinte minutos de donde vivo... este agosto no tengo muchas ganas de moverme demasiado, y mi novia trabaja desde hace este lunes, y como quiera que sus horarios son comerciales (incluso trabaja los findes de semana), tocaba buscarse algo muy cercano :-D

Ahhhh... hace bastante tiempo que no tenía esa sensación de "¡qué agusto que estoy!"... sin que nada me moleste. Ni al curro vienen muchos clientes hoy: fines de junio, ha terminado la renta, hace un calor afuera de muerte,... nada, contra más lejos mucho mejor. Y eso que la mañana ha sido complicadita, pero la tarde ha resultado ser un remanso de tranquilidad. Encima, la jefa no está... ni ella ni sus pilas Duracell :-D

¡Qué felicidad, bendito aire acondicionado! Por mí, ni saldría del curro hoy. Me queda una horita para irme, y hoy, por primera vez en mucho tiempo, saldré JUSTO a la hora. Es más, a las siete menos cinco empezaremos por decreto-ley de un servidor, a cerrar los ordenadores... ¡FIESTAAAAAA!